Ir al contenido principal

El árbol refleja al bosque — Temporada de Eclipses Abril-Mayo 2023

 


¡Hola cibergente! ¿Andan bien? Eso espero, y ante todo agradezco su tiempo e interés de visitar este blog tan olvidado. Como todes, se hace lo que nos da el cuero, y los tiempos no vienen fáciles ultimamente. Pero aquí estamos, resistimos y existimos. En esta oportunidad, vamos a introducirnos en los movimientos que generaron los eclipses de la temporada Abril-Mayo 2023. La temporada empezó con la Luna Llena en Libra, del 05/04, y terminó con la Luna Nueva en Tauro del 19/05. En el medio, tenemos dos lunaciones, los eclipses mismos.

Un poco de contexto...

Hoy, tiempo después de que empecé a escribir esto, lo releeo y me frustra darme cuenta que no llegué a terminarlo antes de los eclipses. Al tratarse de movimientos tan personales, cuesta más abstraerse y sobre todo cuando estos te afectan tan de lleno, como me tocó a mi esta vez. Eso no me dejó con energías ni tiempos para dedicarme a transmitir este mensaje. Así que ahora, en vísperas del fin de esta temporada, me siento de nuevo a descifrar estos enigmas.

Algo que me surgió pensar recién era excusarme por la “falta de claridad” en la que me encontraba. Pero justamente de eso se tratan los eclipses: una ausencia de luz en el día, y un tornasolar de la noche, en la que los opuestos se cruzan y todo se tuerce hacia un estado fuera de lo cotidiano. Es en esas transiciones donde más podemos descubrirnos. Hoy queda analizar los hechos: juntar los restos, acomodar los escombros y reconstruir el panorama roto para recrear una imagen de lo que podría venir, si es que elegimos que venga otra cosa.

En lo personal, no me gustó verme otra vez en la misma dinámica de predicciones abstractas, de fechas, de gráficos y sentir que nada de esto iba a servirle a quienes lo lean y en realidad, tal vez, necesiten ver que del otro lado hay una persona más que tampoco sabe lo que pasa, y esa contención es la que buscamos. Si: al final voy a mencionar fechas y eso, pero bien apartado para la gente obse como yo, que se lo apunta en la agenda y puede medir días y horarios. Mientras, para quienes buscan la visual, vamos con eso primero.

En esta temporada hubieron dos eclipses: uno de Sol en Aries y otro de Luna en Escorpio. Vamos a ver cada uno por separado y a lo último una síntesis de ambos en relación con los ciclos de eclipses del año pasado. Antes de eso, un breve apartado sobre los eclipses en general, para quienes no tengan mucha idea.



¿Qué son los eclipses?

Son un fenómeno natural que ocurre por la misteriosa gravitación de la Luna y la Tierra en su relación con el Sol y otros planetas también. Cada seis meses, se interponen creando este aparente juego de sombras y luces en el que la Luna obtura al Sol —cuando es un eclipse solar, una luna nueva—, y la Tierra rebota la luz solar sobre la Luna creando un espectro rojizo sangre o anaranjado —cuando es eclipse lunar, una luna llena—. Esto ocurre con total normalidad y sus resultados son por lo general muy predecibles al analizarlos sobre la carta natal de cada persona. Nada que temer, mucho que investigar.

Siempre es importante abrazar al eclipse sin expectativas, o por lo menos sin intenciones, cosa que en algunos portales si te recomiendan hacer: listas de intenciones o pedir por algo que buscás manifestar. Esto es en mi opinión siempre contraproducente, porque el eclipse hace lo que quiere, no lo que le pidas.

Algo más para aclarar: todo lo que los eclipses estén moviendo, probablemente no tenga un efecto inmediato pero si bastante obvio. Si te dedicás a observarlos podés darte cuenta por dónde va la mano cuando suceden —por eso al final del posteo van las fechas, sin explayarme.


Sembrar un caballo de Troya despertará al bosque – Eclipse Solar en Aries



Luna nueva a 29° de Aries, el 20/04


La pregunta inmediata que se nos viene a la mente puede que sea ¿cómo me afectan? ¿qué movimientos proponen los eclipses en esta temporada?

Empezando por el signo Aries, desde ya que vamos a mencionar que la temática principal de este fue la individualidad y el deseo. En este caso, la actualización que propone el eclipse va de la mano de un desprendimiento y la pérdida de la insistencia, su sacrificio en pos del nacimiento de un nuevo camino personal. En términos más sociales, siento que este eclipse viene a renovar muchísimo los liderazgos y qué entendemos por conducción. Creo que los personalismos y paternalismos presentes en las tradiciones de las estructuras político-partidarias hacen que los problemas se perpetúen y nunca se resuelvan, porque todavía en el sentido común sigue gobernando “una persona” —un sujeto— y no “un representante” —una función— del tejido social mayoritario. Idealmente deberíamos lograr que quien ocupe ese lugar de responsabilidad asuma que tiene el volante pero que quien empuja el vehículo son los movimientos sociales.



Un eclipse solar en un elemento de fuego: ¿es una bandera que se baja o es una bandera que se enrolla? ¿deja un vacío o deja lugar para el futuro? ¿es apagar una llama? ¿o es migrarla hacia nuevos soportes, cual antorcha olímpica? Si observamos las alineaciones del momento de este eclipse, lo que vemos es la fricción entre lo individual y lo colectivo, nuevamente: el leit motiv de los últimos 10 años, últimamente muy exacerbado durante la pandemia. Esta fricción no va a durar mucho más, y por eso van apareciendo los momentos más fuertes donde las oportunidades de migrar ese deseo aparecen, en clave de «última llamada» a la transformación. Es, en mi opinión, el inicio del fin de la década de los 10's, y el lento inicio de la década de los 20's de este siglo. Hosbawm diría que recién arranca el siglo XXI con este eclipse porque todavía queda la resaca del siglo pasado: el contacto de cuadratura con Plutón a 0° de Acuario va delineando un nuevo capítulo en la historia humana que arranca desde noviembre del año que viene. Un eclipse en un grado 29° como es este caso, un grado de culminaciones, lo reafirma.

¿Qué es eso que se apaga? O mejor dicho: ¿qué es eso que se enciende? Lo que se apaga, en clave histórico-cultural de nuestro lado del mundo, podría bien ser un sentir de que lo que ocurre alrededor no me afecta, interrumpe, intercede o predispone el propio desear, las búsquedas o los destinos personales. Y lo que se enciende, es la relación de estas dos variables pero condicionadas por el regente del eclipse (Marte en Cancer), que es la imagen de una olla a presión, una olla popular, que si no tiene una válvula de escape del sistema actual explotará de acá a varios años. Ese fuego recién se prendió. ¿Y la válvula dónde está? De eso se trata el eclipse que sigue.


Juguemos en el bosque, mientras el lobo no está – Eclipse Lunar en Escorpio


Luna llena a 15° de Escorpio, el 05/05


Esa «válvula de escape» está representada por este eclipse. La imagen de que esa olla a presión fue antes un espacio de contención me resulta paradigmática para esta luna. Escorpio es un signo muy complejo de descifrar y a veces puede ponerte las cosas en la cara pero tras un velo para que busques por todos lados menos por donde tenías que haber empezado. Escorpio es una transmutación y es ese parto, ese proceso donde nacer es salir por esa válvula de escape.

Por las alineaciones de ese día, se trata de encontrar un espacio donde poder crear y recrear esa formas del deseo, de la subjetividad y los horizontes personales a los que el eclipse en Aries le “puso la tapa”. De esto se trata la oposición a Urano que hizo la Luna eclipsada: abrirla al espacio de lo nuevo, poner en crisis esa limitación, hacerla salir por la ventana más estrecha y en esa presión, transformarla de un estado a otro.




Como toda transformación, está implicada una pérdida de forma. Pero aquí lo que me gustaría pensar es en las semejanzas entre los cuerpos y sus sombras, en que lo que se pierde sea esa distancia. Escorpio es el signo de la sombra, y ¿qué es una sombra sino una proyección en el espacio de un cuerpo que se interpone ante la luz? Si podemos ver la sombra es porque hay mucha luz del otro lado. Dicho de otro modo: las sombras nunca son ajenas a sus cuerpos de origen.

En el clásico juego del bosque y el lobo, donde un grupo debe huir de ese animal feroz, podríamos ver representada a la sociead huyendo de eso que está latente, y se intercambian los roles donde el lobo se esconde primero para atacar y la sociedad se esconde después para protegerse. Pero si lo vemos a la luz de este eclipse, es casi decir que la sombra es llamada por la sociedad, casi tentada aparecer en escena, donde en ese intercambio e intermitencia, el lobo y quienes juegan en el bosque son el mismo ser. Esas dualidades son las que este eclipse en Escorpio busca anular y fundir en un solo amalgama mutante.

Si llevamos esta reflexión al campo social-cultural, la re-emergencia de las facciones fascistas no son otra cosa que un pulso energético de la historia que fue mutando y que cada tanto se esconde. Es la fuerza tanática que quizás nunca podamos erradicar, sino más bien ir condicionandola de modo tal que sus resultados sean, por lo menos, cada vez menos drásticos.

Esto implica un desafío importante y que va de la mano con el primer eclipse: que podamos articular una manera de integrar, asimilar y reorganizar esa energía para transformar sus desenlaces. Las crisis sociales no son otra cosa que la sumatoria de las crisis personales que no logran una salida, esa válvula de escape, y encuentran en la potencia colectiva una manera de acoplar la descarga que precisa una forma para lograr su cambio. Si algo nos enseña la alquimia, es que ninguna transformación puede llevarse a cabo de manera controlada si no hay una fuente de contención a su alrededor, un alambique, una maceta, una olla que aunque presiona, contiene.

Esa olla a presión, hoy en día, son las estructuras ideológicas que nacieron en la modernidad y que están en disputa: las democracias, las naciones y los estados. Una transformación que debe cocinarse a fuego lento.



Estrategia de rotaciones – El 2023 como año transicional entre ejes nodales: de Tauro/Escorpio a Aries/Libra


Resulta mucho más sencillo leer el Eclipse Lunar en Escorpio porque es el anteúltimo de la saga de eclipses que vienen pasando desde Noviembre de 2021. Cada año y medio el eje de signos donde ocurren los eclipses cambia, pero eso no implica que no hayan matices entre ellos. Este año es uno con muchos matices y lo que me parece importante es que, para comprender por dónde van los eclipses, hay que leer más a los regentes planetarios de esos signos, porque son los mismos en ambos casos: Venus y Marte.

Esta temporada de eclipses presentarán desafíos en el campo del deseo, de las relaciones, de los recursos y de las decisiones. Veamos esto en detalle, para saber qué es aquello que se verá movilizado por los eclipses:

El eje Aries-Libra comprende las relaciones que mantienen nuestros deseos, acciones y objetivos, con las personas involucradas, los valores que las asocian y los puntos de vista que tienen esas partes. Es cómo me veo y cómo me relaciono; qué forma tienen los vínculos y sus contratos, y qué objetivos persiguen esas asociaciones. Por eso son signos direccionales, o en términos técnicos, signos cardinales.

El eje Tauro-Escorpio simboliza la materialidad donde se encarna ese desear, sea los cuerpos a los recursos, los territorios y lo determinante de la existencia. Aquellos conflictos que nacen como efecto de la creación. El pulso necesario que requiere la creatividad, la ruptura de las formas preexistentes y el reciclaje de lo roto para darle vida a lo creado. Por ende, son signos que buscan almacenar la energía en formas y en procesos, o en términos técnicos, signos fijos.

Venus y Marte son funciones opuestas y complementarias, resonantes con ambos ejes de signos. Describirlos sería redundante, asi que a lo ya expuesto, imaginen una dupla que se encarga de manifestar todas estas acciones: Venus encargada de Tauro y Libra una vibración hedonista, que busca el equilibrio de todas las formas existentes; Marte encargado de Aries y Escorpio una vibración disruptiva, transgresora, direccionadora y destructora.



Cabe mencionar que la comunicación y el criterio será clave en este aspecto. Es la voluntad de explicitar y de llegar a un consenso lo que permitirá que estos movimientos sean bien contenidos en entornos seguros y no sean un mambo. Los signos Géminis, Cáncer y Virgo se verán afectados pero no directamente por los eclipses, sino por participar como actores auxiliares en estas escenas. Del mismo modo los planetas Mercurio y Júpiter. Urano y Neptuno serán planetas expansores de estos efectos, que los amplifican a niveles colectivos. Pero eso no lo veremos sino más adelante, ya que son procesos que llevan más tiempo en desenvolverse.

Por ende, podríamos decir que desde noviembre 2021 con el primer eclipse en Tauro, hasta el último eclipse en Aries en marzo de 2025, estos procesos tan intrépidos irán de la mano de Venus y Marte. Son años donde podemos esperar muchísimas perturbaciones en la manera de materializar el deseo, de enlazar las acciones conjuntas y de encontrar un equilibrio entre nuestros objetivos comunes. Pero lo más interesante es poder observar el vals de las alinzas que se van tejiendo y cómo quienes deben estar, estarán, y quienes deban irse, se irán. Porque si en algo están enchufados los eclipses es en el destino y en la historia.

Pensando en Venus, la regente de Tauro, signo donde está Urano durante este gran período, aparece en el frente la temática del valor y la economía, y cómo agregar valor a aquello que ya existe y tiene un (des)precio. Para agregarle valor hay que ponerle historia, ética y consenso. La historia es lo que le da el peso a las cosas. La ética es lo que le da honor, y el consenso le dará el respeto. Por los próximos dos años, Venus dejará de regir el Nodo Norte —el cómo se evoluciona— y pasará a regir el Nodo Sur —lo que debe evolucionar—. Lo opuesto pasará con Marte. Este intercambio supone que lo próximo a reflotar es un pulso de combate por sobre el equilibrio condescendiente con el eje nodal en Aries/Libra, en contraposición a la resistencia a las transformaciones por la valoración de lo adquirido que significó el eje nodal de Tauro/Escorpio. Desde este año hasta el 2025, los pactos de palabra irían en detrimento, los contratos viejos y las éticas se regenerarán a partir de la urgencia de las acciones que deben ser tomadas, en favor de la unidad y la renovación, acompañando el ingreso de Plutón en Acuario, ese nuevo capítulo en la historia humana que va comenzando.


Nos leemos, nos sentimos

Cariños, XSIS


***


**ANEXO**

Los planetas personales (Mercurio, Venus y Marte, aunque en esta ocasión por la proximidad voy a considerar también a Júpiter) son quienes activan los eclipses al tocar esos puntos específicos del Zodíaco. Esto implica que los efectos de estos tránsitos van mucho más allá del momento en el que suceden, y así podemos ir trazando su desenlace.

Las fechas con un * son las que ocurren durante una temporada de eclipses mismas, dándole más potencia.


Fechas importantes acerca de estos dos eclipses:

15.05.23 – Júpiter activa el Eclipse en Aries

31.05.23 – Mercurio activa el Eclipse en Escorpio (por oposicion)

15.08.23 – Jupiter activa el Eclipse en Escorpio (por oposicion)

11.10.23* – Marte activa el Eclipse en Aries (por oposicion)

21.10.23* – Mercurio activa el Eclipse en Aries (en oposicion)

31.10.23* – Mercurio activa el Eclipse en Escorpio

02.11.23* – Marte activa el Eclipse en Escorpio

03.12.23 – Venus activa el Eclipse en Aries (por oposicion)

17.12.23 – Venus activa el Eclipse en Escorpio

28.04.24 – Venus activa el Eclipse en Aries

14.05.24 – Mercurio activa el Eclipse en Aries

08.06.24 – Marte activa el Eclipse en Aries






Comentarios

Entradas populares de este blog

A la deriva transpersonal – El devenir comunitario entre Urano, Neptuno y Plutón

  ¡Hola cibergente! Bienvenides a esta primera para dentro del tour de posteos del 2024. ¿Saben por qué no es raro que estemos sintiendo tanta angustia? Porque socialmente nos estamos dando cuenta que algo está terminando . Si de verdad sentimos tanta falta de certeza hacia el futuro , es porque de algún modo, nos estamos quedando sin libreto. Sin manera de saber con firmeza o convicción qué nos espera. En otro momento, la vida era bastante predecible : el calendario ofrecía cierta solidez, las actividades eran pactadas con palabras y no con reacciones de emojis. Había cierto compromiso con el uso del tiempo y las instituciones tenían un mayor porcentaje de defensores de su status quo, lo que las hacía funcionar más eficientemente, mas allá de la corrupción, que es una constante a lo largo de la historia de los poderes. Es decir, también era predecible. Pero cuando pienso en las dinámicas actuales, veo que las instituciones son fácilmente perforables , invadibles, deformables.

Pacto de titanes — La explosiva unión de Júpiter y Urano.

  ¡Hola cibergente! ¡Feliz temporada de Acuario! ¿Cómo vivieron la conjunción de Sol y Plutón, mientras ambos iban entrando en Acuario el fin de semana pasado? (19-21/01). ¿Notaron por donde van empezando sus liberaciones personales? ¿Ya se animaron a decir BASTA de esto? Es bueno notarlo porque a nivel personal, la conjunción que desarrollaré ahora es un gran potencial para dar un giro de valor en donde no nos animamos o en donde nos cuesta ceder para adaptarnos . Es un envión creativo que veremos desarrollarse con el tiempo, pero que sienta un parteaguas en nuestro modo de plasmar el deseo en la materia . La zona Tauro de nuestra carta estará por experimentar un único momento que nos pide desbocarnos, a romper con las inercias y dar vuelta eso que parece inamobible . Hoy lo que me convoca es comentarles de una de las alineaciones estrella del 2024 . Porque entre otros asuntos celestes, marzo y abril nos traen un fenómeno astrológico poco frecuente . Aproximadamente, cada 13-1

Pisarás serpientes y treparás escaleras — Los Eclipses del año y sus fechas de activación (¡hasta abril 2026!)

  ¡Hola cibergente! Bievenides a esta nueva parada del astrotour 2024. ¿Andan bien, en lo posible? Por estos lados, un poco en cualquiera, porque la verdad está todo en cualquiera. Así que andamos ya no hechas mierda sino “hechas contexto”. Pero enfoquémosnos, aquí, en lo que nos motiva a este posteo. ¡No falta mucho para los eclipses! Recordamos que los eclipses son fenómenos comunes , nada sobrenaturales sino cósmicos. En su elegancia está la necesidad de atender su mensaje, y en su misterio, radica nuestra voluntad de descubrirlo. Su paso por nuestra carta natal abre y cierra etapas de nuestra vida , como en un juego de serpientes y escaleras. Los eclipses de marzo y abril Eclipse lunar 5° Libra 25.03.24 Eclipse solar 19° Aries 08.04.24 Los eclipses de septiembre y octubre Eclipse lunar 25° Piscis 18.09.24 Eclipse solar 10° Libra 02.10.24 Alianzas emergentes – las nuevas direcciones desde marzo y abril Como ya pudimos observarlo en 2023, los eclips